LEMA

! POR LA LIBERACION ECONÓMICA, CULTURAL Y POLÍTICA DE NUESTROS PUEBLOS !







11 diciembre 2017

PALESTINA LIBRE



Una vez más Estados Unidos viola el mandato de la ONU, las múltiples resoluciones emitidas por más de seis décadas, el derecho del heroico pueblo palestino y el Derecho Internacional, al designar a la ciudad de Jerusalén como capital del estado sionista de Israel y trasladar la sede de la embajada de EE.UU. a esa ciudad. 

La declaración unilateral, arbitraria y colonialista, eleva a grados inauditos la tensión en la región y se convierte de hecho en una brutal provocación.

El Comité Internacional Paz, Justicia y Dignidad a los Pueblos rechaza enérgicamente la decisión adoptada por el gobierno de Trump que vulnera el derecho del pueblo palestino a su sagrada tierra con Jerusalén Oriental como su capital.

Por casi tres décadas se han llevado adelante negociaciones para alcanzar una solución que satisfaga la existencia de dos Estados, donde se respete las demandas del pueblo palestino al retorno a su tierra, la creación de un Estado independiente, libre y soberano, la libertad de los miles de prisioneros políticos en cárceles de Israel, con Jerusalén Oriental como capital del pueblo palestino.

Estados Unidos se erige con impunidad como amo del mundo, ofende la cultura y religión milenaria de los pueblos árabes y musulmanes, pone a la región al borde de una grave desestabilización y hace retroceder el proceso de negociación.

Trump no está loco, Trump es la ultraderecha encarnada en el poder. Su gobierno representa al complejo militar estadounidense del cual el sionista Estado de Israel es parte. 

La humanidad no puede callar ante esta nueva barbaridad del actual inquilino de la Casa Blanca que amenaza a diestra y siniestra, bloquea perversamente a Cuba y Venezuela, controla a los gobiernos que ha impuesto en América Latina, se burla de la ONU y la Paz que tanto necesita la humanidad.

Levantemos la voz desde todo el planeta, en apoyo al heroico pueblo palestino para decirle a Trump alto y claro NO aceptamos su decisión unilateral, No aceptamos la injerencia de EE.UU. en Palestina. No al sionismo, No al fascismo.

Apoyemos las acciones que se están llevando a cabo en todo EE. UU., Canadá, Quebec, Alemania, Austria, Bélgica, Brasil, Cuba, España, El Salvador, Grecia, Francia, Finlandia Noruega, Dinamarca, Irlanda, Nueva Zelandia, Marruecos, Reino Unido, Suecia, Túnez con la consigna: EE. UU. y Sionistas, ¡Manos Fuera de Jerusalén, Capital de Palestina!

Comité Internacional Paz, Justicia y Dignidad a los Pueblos, 
7 de diciembre de 2017 

El Frente Cultural Revolucionario, desde luego se adhiere a esta declaración, y se solidariza con la lucha del pueblo palestino en pro de la devolución de sus territorios y su libertad. En otro orden de ideas, el FCR, rechaza la llamada “Ley de Seguridad Interior”, que pretende la militarización del país. Todos los mexicanos necesitamos seguridad, pero sin una guerra inútil.

¡POR LA LIBERACIÓN ECONÓMICA, CULTURAL Y POLÍTICA DE NUESTROS PUEBLOS!

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TRUMP ATACA LA CAUSA NACIONAL PALESTINA

Viola el derecho internacional y provoca la guerra

El anuncio del presidente estadounidense Donald Trump reconociendo a Jerusalén como la capital del estado sionista israelí, y la decisión de establecer en esta ciudad la embajada de los estados unidos en Israel, son una afrenta al derecho internacional, una violación de las resoluciones de las naciones unidas, y un delito abyecto A la dignidad, el honor y los derechos del pueblo palestino. Constituyen otro obstáculo para la realización de la causa nacional palestina y son una provocación de la guerra.

Por lo tanto, el imperialismo estadounidense está en contra de la opinión de la abrumadora mayoría de las naciones y en contra de los acuerdos bilaterales previamente firmados. Desencadena la oposición de los pueblos, especialmente los árabes, y provoca desacuerdos de sus propios aliados.

Actuando de nuevo de manera brutal y unilateral, el imperialismo estadounidense beneficia al agresivo estado sionista, que viola constantemente las leyes internacionales, comete matanzas del pueblo palestino y siembra inseguridad en todo el oriente medio.

El Consejo Mundial de la paz repudia la declaración y la decisión de Donald Trump sobre la cuestión de Jerusalén. Reafirmamos nuestro esfuerzo por la paz y nuestra solidaridad ilimitada con el pueblo palestino en su lucha por un estado palestino independiente con Jerusalén oriental como su capital.

*Socorro Gomes,
 Presidente del Consejo Mundial de la Paz

El Movimiento Mexicano por la Paz y el Desarrollo, también manifiesta su firme condena a la decisión unilateral del presidente de los EE. UU. Donald Trump de reconocer a Jerusalén como la capital del Estado de Israel, desoyendo las opiniones de la opinión mundial. Lo cual es una amenaza que puede desencadenar una escalada de violencia en Medio Oriente, y podría tener repercusiones negativas para la paz y la seguridad internacional.

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TRUMP Y SU YERNO KUSHNER 
INCENDIAN AL PLANETA:
 JERUSALÉN “CAPITAL FAKE” DE ISRAEL

Después de la novena cruzada del siglo XIII para capturar Jerusalén del control de los musulmanes, ocho siglos más tarde Trump emprende su décima cruzada, esta vez sin el aval del papado ni de la mayoría de los cristianos, y sólo con el apoyo masivo de Israel.

La estrategia de Trump, quien no tiene nada de loco, va viento en popa: se encapsula en el frente doméstico mediante su santa alianza con la dupla del primer ministro israelí Netanyahu y el mafioso magnate de casinos Sheldon Adelson, lubricada por su controvertido yerno, el judío ultra-ortodoxo Jared Kushner 

En el frente doméstico, Trump se adueña de la Suprema Corte y empuja la reforma impositiva que favorece al dólar y apuntala a la bolsa de Nueva York a niveles no vistos en medio siglo.

Trump radicaliza su israelización cuando ha sustituido su mantra de Primero EU por “Primero Israel”, al precio que fuere, ya que su temerario reconocimiento de Jerusalén como “capital fake (falsa)” de Israel daña los intereses de EU en el mundo al aislarse más, a la par de Israel: Estado paria/racista/ apartheid.

La Coalición de Judíos Republicanos proclamó a Trump como uno de los mayores amigos de Israel, mientras el primer ministro Netanyahu exultaba de júbilo por la histórica medida.

El Canal 10 de Israel expuso que Netanyahu y sus ayudantes fueron socios activos en la medida. ¡Es dramática y de alto riesgo la mimetización de Trump con Netanyahu y de EU con Israel! ¿Es más Netanyahu el presidente de facto de EU que el propio Trump?

En mi reciente libro Trump y el Supremacismo Blanco: Palestinización de los Mexicanos, que presenté en la FIL de Guadalajara, aduje la convergencia de los supremacismos de Trump y Netanyahu, lo cual se epitomiza con el enésimo despojo, esta vez de Jerusalén, a los palestinos.

La crítica interna en EU ha sido también feroz: el ex director de la CIA John Brennan fustigó que el accionar de Trump era temerario y dañaría los intereses de EU en el Medio Oriente por los años venideros y hará a la región más volátil.

El traslado de la embajada de EU de Tel-Aviv a Jerusalén –a una distancia de 67.4 kilómetros y a hora y media por carretera– carece de efectividad funcional cuando cuenta con su consulado en la parte occidental.

La medida unilateral de Trump/Jared Kushner contra las resoluciones de la ONU es eminentemente simbólica debido a la anatomía teológica de las tres grandes religiones monoteístas del planeta que arropa en la parte oriental (la antigua ciudad) de Jerusalén con sus célebres cuatro barrios: 1. El barrio cristiano: asiento de la iglesia del Santo Sepulcro de Cristo; 2. El barrio armenio (sic), con su Patriarcado; 3. El barrio musulmán: asiento de Haram al-Sharif (Noble Santuario) con el Domo de la Roca y la mezquita de Al Aqsa de donde, según la tradición islámica, el Profeta Mahoma ascendió al cielo en 621 dC y 4. El barrio judío: asiento del Muro de Lamentaciones y adonde fue a rezar Trump con su kipá 

Desde 1948, Israel ha carcomido los territorios palestinos: hoy ocupa 78 por ciento del territorio original cediendo las migajas de Gaza y Cisjordania contra las resoluciones de la ONU.

La dupla Trump/Jared Kushner beneficia los intereses israelíes –15 millones a escala mundial, de los cuales 6 millones habitan en EU y otros 6 millones están en Israel donde todavía vive agazapado 20 por ciento de árabes maltratados– en detrimento de mil 800 millones de musulmanes (25 por ciento de la población mundial) esparcidos en 57 países miembros de la Organización de la Conferencia Islámica 

Para los mil 800 millones de musulmanes Jerusalén es Al-Qods, que significa en árabe la ciudad sagrada: tercer sitio venerable del Islam después de la Meca y Medina.

Para la mayoría de los dos 400 millones de cristianos –que incluyen a mil 200 millones de católicos (cuyo papa Francisco repudió la temeraria decisión de Trump), a 260 millones de ortodoxos y a 900 millones de protestantes (casi 150 millones en EU: 46.5 por ciento de su población).

Vale matizar: los 900 millones de protestantes globales ostentan varias denominaciones en EU, Gran Bretaña y Europa Occidental: estas dos últimas entidades han repudiado la medida, mientras existe un grupo evangelista pro-Israel en el “Cinturón Bíblico (Bible Belt)” del sur de EU, los cristianos sionistas (sic), que apoya la ultrajante medida. Trump corre un grave riesgo si apuesta su volátil suerte en los cristianos sionistas: fundamentalistas evangelistas sureños que se olvidan de las fuertes críticas a los israelíes del tildado antisemita (sic) Martin Lutero. 

China, de mil 379 millones de habitantes, se ha sumado a la condena universal.

Suena inverosímil que por unos vulgares 25 millones de dólares donados por Sheldon Adelson a la campaña de Trump, éste haya sucumbido a las exigencias de Netanyahu. ¿Tan barato se vende Trump?

La Santa Alianza religiosa del ultra-ortodoxo judío Jared Kushner con la dupla Netanyahu/Sheldon Adelson –a la que parece haberse sumado Haim Saban: mandamás de Univisión, socio de Televisa y filántropo del ejército de Israel  –es tan profunda que el controvertido yerno de Trump financió los asentamientos ilegales de colonos israelíes en la tierra ocupada de Palestina.

Trump ha roto con la política exterior de varios presidentes de EU de casi 70 años.

El Congreso de EU es corresponsable secuencialmente de la temeraria medida cuando adoptó hace 22 años una ley para trasladar su embajada de Tel Aviv a Jerusalén. Peor aún: en junio pasado de este año, el Senado de EU aprobó la resolución simbólica de 1995 y exigió a Trump implementar dicha ley.

El problema aquí radica en la “doble nacionalidad” de varios de los miembros del Congreso de EU y cuya lealtad es primero a Israel y por último al país que dicen representar. Una situación similar a la que se vivió en México con el embajador mexicano ante la Unesco, Andrés Roemer Slomianski, quien recibía órdenes directas del gobierno de Israel en contra de México que lo financiaba.

Habría que ver qué tanto Trump se beneficia en el seno doméstico. ¿Qué porcentaje de los evangelistas de EU, entre blancos y afro estadunidenses, aprobarán su medida?

Más allá de las esperadas manifestaciones masivas y la quema tanto de las banderas de EU e Israel como de las efigies de Trump y Netanyahu, el caos global que desató el presidente de EU, para crear un propicio ambiente bélico, tiene como objetivo final la guerra de Israel contra Irán: ya sea en forma directa, o en forma indirecta contra Siria y/o la guerrilla chiita de Hez bola en Líbano, hasta el último soldado estadunidense.

*Bajo la Lupa, en la Jornada, Alfredo Jalife-Rahme

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LA NIÑA PALESTINA DEL ABRIGO ROJO

Parada en una calle desierta
En una esquina de Palestina
En el refugio de una herida abierta
Tan pequeña, mirando a la nada
Tan estremecedor como el rocío de la madrugada
Su seriedad es el brillo del filo de una espada.
* * *
Recogiendo los susurros de los escombros
Camina por los ecos de su pasado
El peso de un futuro oscuro a sus hombros
Con la nostalgia de algún sueño aniquilado.
* * *
Parada en una calle tranquila
En un rincón de Palestina
Arrastrando su abriguito rojo
Vigilando nuestros pasos de reojo
* * *
Quizás siempre vigilante, su piel erizada
Parece estar parada mientras el mundo gira
Con el susurro de la muerte en su mirada
Más allá del horizonte sus ojos maduros miran
Hebron no olvida sus calles bombardeadas.
* * *
No existe un ápice de temor
No es esclava de nadie
Su abrigo rojo guarda su calor
La mujer que un día será depende de un futuro en el aire.
* * *
Obviando ansias fanáticas de poder
La más libre de un campo de refugiados
El recuerdo de los eternos olvidados
Los pulmones, que hicieron sordas las bombas, al nacer.
La ternura en una calle de Palestina
La puesta en evidencia de aquel que les domina
* * *
Tan dura como la corteza de un olivo
Tan frágil como sus ramas ardiendo
Tan triste como un rebelde cautivo
Tan esperanzadora como el sol amaneciendo
Tan hermosa como ver niños jugar sin miedo
Tan brillante como Jerusalén contra el cielo.
* * *
El corazón de Palestina brilla en el rojo de su abrigo
Ella lo agarra con fuerza,
Las banderas provocando al viento son testigos.
* * *
Tiene los pantalones manchados de tierra
La tierra de su pueblo,
Una mirada suya detendría mil guerras
Su cabello agarrado ansía alzar el vuelo
Como las familias de los mártires muertos.
* * *
Una de tantos niños palestinos
Corriendo por sus calles
Limpian los horrores del enemigo
Y es que no hay colono que ocupe un corazón así
Jamás habrá motivo para apuntar a un niño con fusil.
* * *
Hablarán del odio palestino
Para no llorar cada anochecer
Por matar niños y cerrarles el camino
Aquellos que un día sufrieron hoy levantan muros al atardecer.
* * *
Verla caminar tranquila
Es el terrorismo del que habla Israel
Quizás un día le roben la infancia
Con las cadenas que amenazan su suave piel
* * *
Ella es el motivo y el fuego de la Intifada
Oír a un niño llorar en una cárcel
Justifica cualquier piedra lanzada
Ese es el gran crimen del gigante cruel,
* * *
Sus ojos mirando a la nada
Son la bomba que derribará el muro
Y en los dibujos que guarda
Se escribe el sueño de un frágil futuro.
* * *
Tan pequeña como Cisjordania
Tan hermosa, imposible ignorarla
Si pasara por un chekpoint caminando
Se pararía el mundo que la está olvidando.
* * *
La niña palestina del abrigo rojo
No mira de frente a la cámara, mira de reojo
Porque la libertad la guarda en el brillo de sus ojos
* * *
Que al mundo también recuerde
a la niña Palestina del abrigo rojo.
* * *

 Hermoso poema inspirado en una simple niña palestina, pero a la vez nos describe la terrible realidad que miles de niños palestinos, sufren bajo la ocupación sionista.

¡¡¡Solidaridad con Palestina y su Pueblo!!!

06 noviembre 2017

100 AÑOS DE LA REVOLUCIÓN BOLCHEVIQUE

 ¡Paz, Pan y Tierra!  ¡Todo el Poder a los Soviets!  

Al abordar el estudio de la sublevación bolchevique, es importante tener en cuenta que no fue el 25 de octubre (7 de noviembre) de 1917, sino muchos meses antes, cuando se produjo la desorganización de la vida económica y del ejército rusos, término lógico de un proceso que se remontaba al año de 1915. Los reaccionarios sin escrúpulos que dominaban la corte del zar habían decidido, deliberadamente, el hundimiento de Rusia, a fin de poder concentrar una paz separada con Alemania. La falta de armas en el frente, que tuvo como consecuencia la gran retirada del verano de 1915; la escasez de víveres en los ejércitos y en las grandes ciudades, el cese de la producción y de los transportes en 1916, todo ello formaba parte de un gigantesco plan de sabotaje, que la revolución de febrero vino a contener a tiempo.

Durante los primeros meses del nuevo régimen, en efecto, a pesar de la confusión consiguiente a un gran movimiento revolucionario como el que acababa de liberar a un pueblo de 160 millones de hombres, el más oprimido del mundo entero, la situación interior, así como la potencia combativa de los ejércitos, mejoraron sensiblemente. Pero esta "luna de miel" duró poco. Las clases poseedoras querían una revolución solamente política que, arrancando el poder al zar, se lo entregara a ellas. Querían hacer de Rusia una república constitucional a la manera de Francia o de los Estados Unidos, o incluso una monarquía constitucional como la de Inglaterra. Ahora bien, las masas populares querían una verdadera democracia obrera y campesina.

Ahora bien, fueron precisamente esos elementos, las clases poseedoras, quienes, viendo crecer el poderío de las organizaciones revolucionarías de la masa, decidieron destruirlas, costase lo que costase, y poner una barrera a la revolución. Dispuestos a alcanzar sus objetivos, recurrieron a maniobras desesperadas. Para derribar el ministerio Kerenski y aniquilar a los Soviets, desorganizaron los transportes y provocaron perturbaciones interiores; para reducir a los Comités de fábrica, cerraron las fábricas e hicieron desaparecer el combustible y las materias primas; para acabar con los Comités del ejército restablecieron la pena de muerte y trataron de provocar la derrota militar.

Esto era, evidentemente, arrojar aceite, y del mejor, al fuego bolchevique. Los bolcheviques respondieron predicando la guerra de clases y proclamando la supremacía de los Soviets.

Los Bolcheviques constituyeron un gabinete con Lenin como presidente del Consejo y Trotski como ministro de Asuntos Extranjeros. Poco después de la revolución de febrero, su llegada al poder aparecía como inevitable. La historia de los bolcheviques, después de la revolución, es la historia de su ascensión constante.

Lejos de ser una fuerza destructiva, me parece que los bolcheviques eran en Rusia el único partido con un programa constructivo y capaz de imponer ese programa al país. Si no hubiesen triunfado en el momento que lo hicieron, no hay apenas duda para mí de los que los ejércitos de la Alemania imperial habrían entrado en Petrogrado y Moscú en diciembre, y de que un zar cabalgaría hoy de nuevo sobre Rusia.

Independientemente de lo que se piense sobre el bolchevismo, es innegable que la revolución rusa es uno de los grandes acontecimientos de la historia de la humanidad, y la llegada de los bolcheviques al poder, un hecho de importancia mundial.

Prologo; 10 DÍAS QUE CAMBIARON EL MUNDO
 *John Reed. R. Nueva York, 1 de enero de 1919. 

¡POR LA LIBERACIÓN ECONÓMICA, CULTURAL Y POLÍTICA DE NUESTROS PUEBLOS!

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DE MARZO A OCTUBRE


¡A los ciudadanos de Rusia!

El Gobierno Provisional ha sido depuesto. El Poder del Estado ha pasado a manos del Comité Militar Revolucionario, que es un órgano del Sóviet de diputados obreros y soldados de Petrogrado y se encuentra al frente del proletariado y de la guarnición de la capital.

Los objetivos por los que ha luchado el pueblo —la propuesta inmediata de una paz democrática, la supresión de la propiedad agraria de los terratenientes, el control obrero de la producción y la constitución de un Gobierno Soviético— están asegurados.

¡Viva la revolución de los obreros, soldados y campesinos!

El Comité Militar revolucionario del Sóviet de diputados obreros y soldados de Petrogrado

25 de octubre [7 de noviembre] de 1917, [escrito por Lenin]

El siglo XX llegó a Rusia marcado por la crisis económica. La quiebra de la Bolsa de San Petersburgo, la caída del precio del petróleo y de la producción industrial destruyeron un gran número de puestos de trabajo. Las huelgas se multiplicaron exponencialmente desde 1903, cuando, además, el desastre de la guerra con Japón mostró con toda su crudeza la debilidad del Ejército zarista. En aquel ambiente de profundo deterioro y desconcierto, el 9 de enero de 1905 una gran marcha pacífica, que pretendía entregar al zar un manifiesto de reivindicaciones, fue brutalmente reprimida: el Domingo Sangriento provocó durante los meses siguientes el levantamiento de decenas de miles de obreros y soldados hasta que, a finales de octubre, lograron que el propio Nicolás II aceptara, al menos en teoría, un programa de reformas.

Pronto rectificó la autocracia zarista con el objeto de mantener intactas sus prerrogativas. De hecho, las cuatro sucesivas Dumas reunidas entre la segunda mitad de 1906 y febrero de 1917 resultaron inoperantes ante la reacción del poder, contraria a las transformaciones político-institucionales que, impulsadas por los liberales -sobre todo en las dos primeras ocasiones-, proponían un modelo de Estado con una constitución homologable a las occidentales. Ni la demanda de reforma agraria, ni la de separación Iglesia-Estado o de autonomía para la Asamblea Legislativa, entre otras aspiraciones de los sectores reformistas, obtuvieron respuesta positiva del zar.

En un clima de tensión permanente, las propuestas liberales se vieron sobrepasadas por las de mencheviques, social-revolucionarios y bolcheviques. Estos grupos de oposición, se fortalecían ahora que las expectativas de cambio eran refutadas por la creciente represión contra los críticos del régimen. Los bolcheviques contaban con un líder en el exilio, Vladimir Ilich Lenin, cuya incisiva capacidad teórica para el análisis de la realidad rusa se conjugaba con unas dotes especiales de estratega en el terreno práctico.

Para agravar el estado de cosas, la entrada de Rusia en la Gran Guerra fue desastrosa. Las enormes pérdidas humanas, cifradas en millones de personas, obligaron a la movilización de reservistas mientras el hambre y el descontento crecían exponencialmente. La propaganda antibelicista, hábilmente conducida por los opositores, se convertía en una crítica a la autocracia, en una exaltada llamada no ya a la reforma, sino a la revolución: el régimen  masacraba a su pueblo enviándolo al frente para preservar el prestigio del zar.

Provocados por la conflagración, los destrozos en la agricultura, la paralización industrial, el colapso de la mayor parte de las rutas comerciales -con la consiguiente escasez de suministros y recambios para la maquinaria- repercutían en el territorio ruso y se agravaban por la falta de mano de obra especializada y por la huida masiva de capitales. Todo ello afectaba no sólo a la mayoría de la sociedad, ya de por sí empobrecida, sino también a la élite que había mantenido casi incólume su apoyo a Nicolás II. Las fisuras en el grupo de poder quedaron de manifiesto con el asesinato, en diciembre de 1916, del monje Rasputín, un oscuro personaje de gran predicamento con el zar y la zarina.

Los pilares del sistema comenzaban a resquebrajarse y continuaron haciéndolo aquel invierno, que trajo consigo el encarecimiento de los artículos de primera necesidad (cuyo precio se multiplicó por cinco y seis), el cierre constante de fábricas y el fatídico aumento del paro. En enero de 1917 el movimiento obrero, controlado por los revolucionarios, se lanzó a la huelga general en las grandes capitales, sobre todo Moscú y Petrogrado -una denominación menos germánica para San Petersburgo-. Su fuerza crecía a la par que perdía apoyos la autocracia. A finales de febrero miles de soldados, desobedeciendo a sus oficiales, se negaron a reprimir las manifestaciones, uniéndose a aquellos a quienes debían perseguir. Los sóviets o consejos obreros,  demostraron su talento organizativo a la hora de ocupar sedes oficiales, controlar el sistema de transporte y de abastecimiento e, incluso, retener a los ministros zaristas. 

Ante la imposibilidad de preservar la autoridad, el 2 de marzo Nicolás II renunció a sus derechos y a los de su hijo en favor de su hermano, el gran duque Miguel, que los rehusó. Lo que más tarde se conocería como la Revolución de Febrero había triunfado y suponía el fin de la dinastía Romanov. La inestabilidad agudizada por la victoria revolucionaria produjo una dualidad de poderes. Por un lado, el sóviet de Petrogrado parecía controlar la situación de hecho y, por otro, la Duma había designado un Gobierno provisional para cubrir el vacío generado por la abdicación del zar: al cual, inmediatamente las potencias occidentales lo reconocieron.

La nueva etapa abierta por el Gobierno Provisional duró hasta octubre y fue un completo fracaso. Entre marzo y mayo el Gobierno dirigido por los liberales no contentó a nadie y ofreció una imagen de escasa solvencia. No había sacado a Rusia de la guerra, posponiendo la decisión ante las presiones de los aliados, principalmente de Francia y el Reino Unido. Aunque prometió la convocatoria de una Asamblea Constituyente para que todas las fuerzas implicadas decidieran el futuro político-institucional de Rusia, su debilidad alentó la presión de los soviets, cuyos principales líderes retornaron entonces del exilio. Así, el 4 de abril, de vuelta en Petrogrado, Lenin expuso sus ideas en la Conferencia de sóviets de obreros y soldados de toda Rusia, auténtico fundamento ideológico de la Revolución de Octubre, reiterando su rechazo frontal a la colaboración con el Gobierno por la voluntad de éste de permanecer en los frentes de guerra.

En mayo comenzaba su andadura un nuevo ejecutivo. Presidido, como el anterior, por el liberal Gueorgui Lvov, tenía la virtualidad de contar entre sus miembros con socialistas moderados, mecheniques e, incluso, social-revolucionarios. Se trataba de que, al verse representados los partidos revolucionarios, los sóviets pudieran controlar la marcha del Gobierno e iniciar reformas reclamadas por ellos como ineludibles. Sin embargo, esta colaboración provocó un duro golpe a la imagen de dichas organizaciones entre el pueblo: el empeoramiento objetivo de la situación jugó en beneficio de los bolcheviques, que no habían aceptado formar parte del gabinete. En efecto, al hecho de que Rusia permaneciera en el conflicto se unieron el deterioro aún mayor del tejido industrial, el aumento del paro y los levantamientos campesinos en Bielorrusia y Rusia central con el fin de organizar el trabajo colectivo de la tierra para compensar el desmesurado aumento de los precios de los productos agrarios.

Después de otro desastre militar en la región de Galitzia, la dimisión del príncipe Lvov condujo a Aleksander Kerenski a la presidencia del Gobierno Provisional. Miembro del Partido Social Revolucionario, acababa de desempeñar las carteras de Justicia y de Guerra, y para muchos reunía las características necesarias para recomponer la deteriorada realidad rusa. Kerenski centró sus esfuerzos en preparar una gran conferencia de Estado donde estuvieran representados los partidos, los sindicatos, los poderes locales, el Ejército, los intelectuales, etc. -en definitiva, el más amplio espectro social- con el fin de elaborar una convocatoria electoral de la que saliera una Asamblea Constituyente comprometida a establecer una República parlamentaria. Reunida en agosto, la conferencia demostró la práctica imposibilidad de enderezar la deriva del país. Los bolcheviques, que habían rechazado participar, convocaron una huelga general mientras hacían correr el rumor de que las fuerzas conservadoras preparaban un golpe de Estado de la mano del general Kornilov, comandante en jefe del Ejército.

Los dos primeros decretos del –“Consejo de Comisarios del Pueblo”– fueron, el de la paz, para traer de vuelta a los soldados, y el de la tierra, para reivindicar a los trabajadores del campo, y progresivamente, a tenor de la encendida lucha de clases en desarrollo, se produjo la supresión de la propiedad privada sobre los medios de producción

Cada vez más aislado, Kerenski no pudo frenar la creciente inflación ni la huida de capitales. El desorden y malestar por la falta de abastecimientos preludiaban un ambiente revolucionario. Kornilov decidió actuar por su cuenta y a finales de agosto marchó con sus tropas hacia Petrogrado. Su fracaso se debió mucho más a la actuación de los soviets que a la reacción del Gobierno. Los guardias rojos bolcheviques, eran la auténtica vanguardia victoriosa. El prestigio del partido se extendió por toda Rusia y se multiplicaron los consejos en donde eran mayoritarios los seguidores de Lenin. Sin duda, era la oportunidad que esperaba éste para deponer a un Gobierno desvalido y hacerse con el poder.

A principios de octubre, Lenin, preparó el golpe de mano. Encargó el levantamiento armado a León Trotski, que acababa de salir de prisión, y le puso al frente del Comité Militar Revolucionario de Petrogrado. La noche del 24 de octubre la Guardia Roja se apoderó, sin resistencia, de los puntos clave de la capital; el 25 asaltó el Palacio de Invierno y detuvo a los ministros. El Gobierno Provisional quedó disuelto. La revolución avanzó con rapidez por el norte de Rusia, conducida por los sóviets respectivos, mientras encallaba en regiones como Siberia occidental, el Cáucaso y la cuenca del Don, donde la defensa promovida por medianos propietarios, tropas del Ejército regular y cosacos logró resistir hasta marzo de 1918. Inmediatamente, con el apoyo de los soviets, Lenin formó un Consejo de Comisarios del Pueblo, compuesto por bolcheviques, que en principio actuaría como Gobierno hasta que pudiera formarse la Asamblea Constituyente, convocada en la etapa de Kerenski.

Rodeado de las figuras más prominentes de su partido (Stalin en Nacionalidades, Trotski en Asuntos Exteriores), Lenin aprobó la puesta en marcha de su programa revolucionario a través de una serie de políticas netamente partidistas. Empezó por anunciar el fin de la propiedad privada de la tierra, cuyo reparto dejaba en manos de los sóviets de campesinos; de igual forma procedió con la industria al anunciar la socialización de la inmensa mayoría de las empresas, ahora controladas por los consejos de obreros. Al mismo tiempo ordenó iniciar las conversaciones de paz con Alemania.

Los bolcheviques tuvieron que enfrentarse a una nueva guerra -esta vez civil, si bien con implicaciones internacionales - que se prolongaría hasta 1921. Dirigida con mano de hierro por Lenin, la Revolución de Octubre había triunfado. Aunque tardara en consolidarse, ni Rusia, ni Europa ni el mundo volverían a ser los mismo.    

          *Ricardo Martín de la Guardia
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QUÉ FUE LA REVOLUCIÓN RUSA*

Para evitar los anacronismos y comprender bien los conceptos, conviene recurrir al libro de David Mandel Los soviets de Petrograd, Ed. Syllepse 2017, París, 560 pp, estudio sociológico fundamental sobre la composición social de los partidos socialistas, los soviets y la clase obrera rusa durante la revolución de 1917. Veamos algunos datos:

Petrogrado tenía 2 millones 412 mil 800 habitantes, de los cuales 416 mil eran obreros, en 60 por ciento metalúrgicos, concentrados en 90 por ciento en 38 grandes fábricas. La población total del imperio zarista llegaba a 134 millones de personasy en ella los obreros eran 3.5 millones. El partido bolchevique contaba en la ciudad con cinco mil militantes en enero de 1917, y con 42 mil antes de octubre. Más de 80 por ciento de ellos eran obreros, sobre todo metalúrgicos, tenían un promedio de edad de 27 años y estaban alfabetizados en 92 por ciento (en la industria metalúrgica todavía no taylorizada los obreros debían saber interpretar un plano, preparar las tareas y las herramientas y conocer matemáticas y trigonometría. Igual cosa sucedía con los obreros de las imprentas pues debían leer manuscritos y componer los textos con tipos o con las recientemente creadas linotipias).

¿Qué fue la Revolución Rusa? La conjunción entre una inmensa revolución campesina precapitalista, la revolución de las minorías nacionales contra el despotismo asiático de los zares y una revolución anticapitalista de una minoría obrera muy concentrada y una parte era avanzada, culta e inteligente. Esas tres gigantescas olas simultáneas barrieron un régimen hacía tiempo condenado.

En efecto, desde la gran hambruna de fines del siglo XIX y la revolución de 1905, la autocracia zarista vivía de prestado y se enfrentaba a la mayoría de la nobleza y a la burguesía que, aliada al gran capital extranjero, buscaba democracia, la inteligencia y la clase obrera que era socialista cuya aristocracia (los impresores) seguía a los mencheviques y su parte más activa (metalúrgicos y químicos), a los bolcheviques y anarquistas. La guerra (que concentró a millones de campesinos-soldados en el frente junto a obreros y estudiantes socialistas) hizo explotar esa mezcla.

En la revolución de febrero participaron todas las clases, las cuales empezaron a diferenciarse desde marzo hasta octubre porque los gobiernos burgueses y los ministros socialistas moderados prosiguieron la guerra odiada que desangraba y hambreaba al país y no dieron tierra a los campesinos.

La revolución de octubre se hizo por eso sin disparar ni un tiro porque las consignas bolcheviques de ¡Pan, paz y tierra! les permitieron ganar la mayoría de la guarnición de Petrogrado, de los soviets y la gran mayoría de las fábricas y sindicatos y recoger el poder convertido ya en un fantasma.

Las revoluciones son el resultado de la insubordinación de las amplias masas. Los bolcheviques reorientados por Lenin y Trotsky no hicieron la revolución: simplemente la encauzaron y organizaron la toma del poder estatal.

Incluso en la izquierda muchos criticaron la Revolución Rusa diciendo que era prematura. Pero si los bolcheviques no hubiesen tomado el poder lo habría hecho una terrible dictadura de la derecha apoyándose en un sector de los oficiales zaristas y la República democrática nacida en febrero se habría convertido en una semicolonia franco inglesa con un poder dictatorial.

¿Fue la Revolución Rusa una revolución obrera? Sí, desde la de febrero mismo, preparada por grandes huelgas desde 1914-1916, la cual fue sobre todo obrera por el papel de los obreros en las manifestaciones, fundamentales para convencer a los soldados campesinos. El partido bolchevique, por su parte, era la organización militante del sector más decidido, joven y audaz de los obreros altamente calificados que la industria de guerra había concentrado en la ciudad.

Los soviets (consejos obreros cuyos diputados eran elegidos y revocados por asambleas) fueron la escuela que permitió la rápida evolución de la mayoría de los obreros hacia los minoritarios pero firmes y esclarecidos bolcheviques, abandonando a los otros partidos socialistas, mayoritarios en febrero pero que seguían aliados a los capitalistas y eran agentes de Francia y de Inglaterra.

La de octubre 1917 fue una revolución obrera dirigida por un partido obrero revolucionario que se apoyó sobre la lucha de las minorías nacionales por su autodeterminación y en el hambre de paz y de tierra de los 14 millones de campesinos enviados a morir en la guerra. En febrero imitó a la Revolución Francesa pero los bolcheviques aprendieron de ésta y de la Comuna de París, hicieron una revolución obrera y la defendieron esperando extenderla a otros países más avanzados para construir el socialismo.

*-Guillermo Almeyra
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El FCR celebra el 100 Aniversario de la Primera Revolución Socialista, uno de los acontecimientos más importantes de la historia,  que tuvo como propósito, construir una Nueva Sociedad, más justa y equitativa para hombres y mujeres.


Vladímir Ilich Uliánov (Lenin) 1870-1924

En la Rusia Zarista en 1917 se llevaba el calendario Juliano, hasta que en 1918, se cambió al Calendario Gregoriano, por lo que el 25 de octubre del viejo calendario, pasó  en el nuevo, al 7 de noviembre, fecha que se conmemora  La Revolución Rusa

04 octubre 2017

FUERZA MÉXICO


México ha recibido apoyo técnico, financiero o en especie de; Alemania, Argentina, Bolivia, Canadá, Chile, China, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Emiratos Árabes, España, Estados Unidos, Guatemala, Honduras, Israel, Italia, Japón, Pakistan, Panamá, Perú, Corea, Rusia, Santa Sede, Suiza, Taiwán, Turquía y Venezuela, así como también a la Unión Europea y de las Naciones Unidas. El FCR agradece la solidaridad en estos momentos dolorosos, de la comunidad internacional y de todos los Estados de la República. Es importante no olvidar y seguir apoyando en; Chiapas, Oaxaca, Puebla, Morelos y la Capital, a las miles de familias damnificadas por los sismos. 

DENTRO DE TRAGEDIA HAY QUE RENDIR HOMENAJE A LOS HÉROES Y HEROÍNAS ANONIMOS

  ¡VIVA MÉXICO!

¡POR LA LIBERACIÓN ECONÓMICA, CULTURAL Y POLÍTICA DE NUESTROS PUEBLOS!

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TERREMOTOS DE 1985 Y DE 2017*


*Elena Poniatowska

-Ya váyanse a su casa.

Los voluntarios traen cascos, buenos zapatos, guantes de carnaza, picos y palas.

De nuevo, son los jóvenes los primeros en acudir.

En la calle, el tráfico impide cualquier movimiento, la Marina, el Ejército, ordenan que se vayan cuando ellos fueron los primeros en llegar.

–Va a entrar la maquinaria, tienen que irse. Son demasiados.

En División del Norte con Gómez Farías, 250 jóvenes esperan para ayudar. De Huixquilucan llegaron 200 brigadistas profesionales, muy bien equipados, con lámpara en sus cascos. Les dijeron: Váyanse.

Todos los jóvenes se vuelcan a la calle. Su capacidad de entrega no tiene límites. El terremoto del 19 de septiembre de 2017, con sus 7.1 grados de magnitud, se parece al que devastó a la ciudad hace 32 años. El 19 de septiembre de 1985 salieron rescatados de los escombros 4 mil 100 personas, entre ellos varios recién nacidos. Ahora, han muerto más de 200 personas y sufrimos en la escuela Rébsamen la tortura del rescate de la niña Frida de la que ya ni siquiera sabemos si es rescate, si se llama Frida, si de veras existió. A la tortura, ahora se añade la incertidumbre. No basta sufrir, también el dolor se inflama como globo que ha de reventar. Pobres padres de familia, alineados en una fila, alejada del edificio derrumbado, en la espera más espantosa de su vida.

En el del 19 de septiembre de 2017, aún no tenemos el número cerrado de muertos, porque sigue ascendiendo y abarca los estados de Puebla, Morelos, estado de México, Guerrero, Chiapas y Oaxaca (que fueron víctimas de un primer terremoto el 7 de septiembre). En el de 1985, muchos mexicanos, entre otros Carlos Monsiváis y yo, vivimos casi tres meses en la calle. Así como lo hace ahora mi querida Carmen Aristegui, fuimos todos los días, a partir del 19 de septiembre al edificio caído para entrevistar a familiares dolidos y a jóvenes brigadistas. En esos días conocí a Evangelina Corona, quien se convertiría en la secretaria del Sindicato de Costureras, y hablé con mujeres desoladas que esperaban en la avenida San Antonio Abad a que sacaran el cuerpo de su hija o de alguna compañera. Casi 40 mil costureras en los edificios de San Antonio Abad y José María Izazaga se doblaban sobre su máquina Singer en más de 200 talleres clandestinos. El Ejército llegó a acordonar los derrumbes con gritos de aléjense, sáquense, no estorben, cuando muchas de ellas podían indicar dónde estaban los baños, dónde las puertas, dónde el pasillo. Fueron las últimas en recibir ayuda. Un mes después los cuerpos sólo eran reconocibles por un anillito, una cadena con una medalla. Evangelina Corona se convirtió en una líder natural y formó el sindicato de costureras 19 de septiembre. En Los Pinos se enfrentó al entonces presidente Miguel de la Madrid: ¡No, señor presidente, está usted muy mal informado, las cosas no son como usted las dice! El gabinete en pleno, estupefacto, miraba a esta pequeña mujer que con sólo decir la verdad, los desafiaba.

Raúl Álvarez Garín montó en un departamento en la colonia Condesa un centro de apoyo al que podían acudir y ser escuchados quienes se habían quedado sin casa. En ese momento, Monsi acuñó la frase sociedad civil, y a partir de entonces hasta la hora de su muerte –el 19 de junio de 2010– habría de dedicarse al análisis de los movimientos sociales que se organizan en México.

¿Qué pasa con nuestro gobierno? ¿Quién cuida a los mexicanos? ¿Dónde están los que mandan y protegen? Aquel 19 de septiembre de 1985, en medio de una nube de polvo, aparecieron los mexicanos más pobres, vaciaron las tlapalerías de picos y palas, y empezaron a escarbar. A ver, compadrito, ¿por dónde dice usted que pasaba su mujer para ir al pan? ¿Por aquí, por esta esquina derrumbada? Venga vamos a escarbar y le juro que la sacamos con vida. Ahora aparecieron los mexicanos más jóvenes, los más generosos, más rápidos, más eficaces que el gobierno, y con una entereza tan contagiosa que nos convencieron de que no estábamos solos. Verlos pasarse una a una, piedras en una larga y fuerte cadena de brazos y manos nos aseguró que salvarían vidas entre los escombros.


Ahora, en 2017, el presidente Peña Nieto sí apareció dando largos mensajes retóricos, porque así habla él; instruye a su gabinete, ordena y se apersona. Lo he visto en ocasiones abrazar a alguna mujer en la plaza pública, pero nunca le he oído un grito verdadero. En 1985, Miguel de la Madrid y su regente Ramón Aguirre, azorados ante la destrucción, se volvieron cascajo, polvo, varilla al aire. Llegaron los brigadistas franceses con sus perros y Ramón Aguirre los envió a dormir cuando ellos están acostumbrados a ir de inmediato al lugar del siniestro. Tampoco el regente lograba abrirles paso en calles atestadas de automóviles y de peatones, como ahora, en que todos salimos a ver cómo ayudamos o, por lo menos, a caminar al lado de otros para sentir su calor y nuestra pertenencia a esta ciudad que amamos.

A raíz de 1985 se hicieron nuevos reglamentos de ingeniería, para no poner en peligro la vida de sus clientes. La pésima construcción en una de las ciudades más pobladas del mundo (20 millones 843 mil habitantes) y, quizá la más peligrosa, es la causa de la muerte de muchos. Ahora cayeron de nuevo edificios construidos tras establecer el nuevo reglamento de 1985. ¿Quién controla? ¿Quién regula la construcción en la Ciudad de México? ¿Quién concede los permisos? ¿Quién propicia el caos y la inseguridad? ¿Quién la desigualdad? ¿Dónde los servicios sociales? ¿Dónde la protección a los niños? ¿El cuidado de los peatones? ¿Las rampas, los desniveles, el respeto a los discapacitados? ¿Quién lucha en esta ciudad disfuncional contra la falta de servicios? ¿Quién palía el hambre? ¿Quién pregunta si estás bien? En 1985, llegaron señoras de trenza y mandil cargando 350 cazuelas de arroz, 500 de frijoles, agua, mucha agua de La Merced, de Tepito, de la colonia Guerrero, de la Bondojito: “A ver, compadrito, vengase pa’ca, lo primero es lo primero y por lo pronto se va a usted a tomar este té y va a ver que encontramos a su gente”. Ahora, para nuestro orgullo, los centros de acopio de 2017 están saturados de agua, de alimentos preparados, de medicamentos (aunque falten algunos muy específicos). En la televisión es continua la solicitud de herramientas, polines, marros, costales, botes, cubrebocas, pilas y lámparas, etcétera. Salta a la vista el agradecimiento generalizado a los jóvenes, los primeros en salir a la calle, dispuestos a pasarse días y noches con tal de rescatar. En este terremoto de 2017 quienes se la jugaron y están dispuestos a seguir jugándosela son los mexicanos de todos los días.

Ni una sola vez he oído mencionar el nombre de Zabludowsky, y en las primeras horas, el único que cubrió el terremoto fue él. Murió Lourdes Guerrero, ¿recuerdan? Gracias a Zabludowsky (quien antes se había hecho eco del gobierno el 2 de octubre de 1968 y declaró que había sido un día normal) México se mantuvo informado hasta que pudieron restablecerse los más mínimos servicios. Cayó la central telefónica en la calle de Victoria. Varias telefonistas murieron y 29 desaparecieron. Cayó la torre de Televisa Chapultepec. Lourdes Guerrero informó exactamente a las 7:19 horas desde su noticiero. Vamos a guardar la calma, tranquilos, tranquilos. El país quedó cortado del mundo. Fueron los radioaficionados y los corresponsales quienes nos comunicaron con el resto del mundo. La radio, la televisión, estaciones como Radio Mil pasaban mensajes a provincia, Radio Barrilito, La Charrita del Cuadrante, Radio AI, más de 30 radiodifusoras AM y FM, Canal Once, Radio Educación, por iniciativa de los trabajadores, y Radio Universidad hicieron labor de enlace: listas de desaparecidos aparecieron pegadas sobre los muros de sus instalaciones. Miles de fotos tamaño pasaporte, descripciones físicas, letreros escritos a mano en una hojita rayada: Se peinaba de copete y tenía barritos. Le gustaba usar tacones y caminaba como pollo espinado. Era muy dormilón. La intimidad al descubierto como los boquetes en los edificios. ¿Hacia dónde correría la quinceañera con esos tacones? Los teléfonos sonaban a todas horas, día y noche y los estudiantes se turnaban para informar, quienes estaban en qué albergue, en qué calle, por qué puerta se podía entrar y a qué centros de acopio podían acudir para conseguir cobijas, ropa y, sobre todo, botellas de agua.


Ahora la información sobrepasó todas las expectativas y el mundo entero se mantuvo al tanto de lo que nos sucede. Los desastres naturales pueden impulsar a la gente a la acción política. En 2017, los escombros abiertos evidenciaron el fracaso de los partidos políticos que no sirven para nada, el abismo entre las clases sociales, la desigualdad y la injusticia, los funcionarios corruptos que no escuchan a los ciudadanos más pobres, la inconciencia de los jefazos que ignoran el peligro, porque ellos siempre están a salvo.

El escándalo del terremoto de entonces ayudó al descubrimiento de los propios recursos humanos y llevó al levantamiento de una sociedad civil sistemáticamente atacada que ha desarrollado a través de los golpes una capacidad crítica que nadie imaginó. Su coraje viene de lejos. Data de 1968, de 1988 –el fraude salinista y la renuncia de Cuauhtémoc Cárdenas–, de 1994 con el levantamiento de los zapatistas que patentizó el olvido de diez millones de indígenas. La matanza de Acteal el 22 de diciembre de 1997, la de Aguasblancas, Atenco, Ayotzinapa, Nochixtlán son puntales de las infamias que aún padecemos. Ya basta, ya no vamos a dejarnos, óiganlo bien, no nos vamos a dejar –exclamó la joven Yunuhen González, sus ojos empañados, ya no de lágrimas, sino de coraje.

Después del terremoto de 1985, muchos cadáveres se reunieron en el ahora centro comercial que antes fue cancha de beisbol. Al Parque Delta llegó un muchacho así flaquito, chaparrito, morenito, el típico mexicano que ha tenido que chambear muy duro, que seguramente vive en una vecindad en una colonia perdida, con su suetercito demasiado delgado, caray, que gente más desprotegida la nuestra; de veras, qué desamparo el suyo; de veras que te da coraje ver a la gente así tan sin nada, contó el entonces estudiante de biología, Antonio Lazcano. ¿Las cajas?, preguntó: ¿Cómo está lo de las cajas? Para él eran tres cajas. Las cajas. Quería saber si había que pagarlas, pero, ¿con qué las pagaba el inocente?

–¿Ya identificaste a tu gente?
–Sí, están ahí, pero, ¿cómo está lo de las cajas?
–No, lo de las cajas es gratis: ahorita te las damos. ¿Vienes tú solo?

“Venía por su hermana y por dos sobrinas, una de 14 años y otra de nueve. Preparé los ataúdes, uno grande y dos pequeños y me di cuenta de que uno tenía dos clavos salidos, pero dije: ‘Ni modo, no importa’. Después vi cómo el flaquito empezó a apachurrar con sus tenis los clavos y como no lo logró se puso a doblarlos con una tabla. Ése solo acto le devolvió toda la dimensión humana a los cadáveres en el estadio, porque, a las cuatro horas, yo pensaba que lo único real eran las bacterias, pero para el flaquito, sus cuerpos –aunque estuvieran todos destrozados eran su gente– y su cadáver tenía derecho a no lastimarse con los clavos.”

En México siempre tiembla. El libro Nada, nadie, las voces del temblor es el recuento de voces, vivas y desaparecidas, conocidas y anónimas. Es la constancia de la valentía, el coraje de una ciudad que cayó y volvió a levantarse. También la ciudad de 2017 volverá a levantarse. Al igual que los damnificados de ayer, que se preguntan si tendrán autoridades mejor preparadas, los brigadistas de hoy, sus padres, sus novias, sus amigos, aquellos que al abandonar el individualismo avanzan en forma irreversible –los muchachos que cubren las calles de la ciudad de México desafían a la naturaleza–, los que están en Puebla, en Oaxaca, en el estado de México, en Morelos, en Guerrero, en Chiapas, nos han devuelto la confianza por su capacidad de entrega y, sólo nos queda preguntarnos si ahora, por fin, contaremos con un gobierno a la altura de nuestra esperanza.
A Rosa Nissán

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EL PUÑO EN ALTO*



Eres del lugar donde recoges la basura. 
Donde dos rayos caen en el mismo sitio. 
Porque viste el primero,esperas el segundo. 
Y aquí sigues. 
Donde la tierra se abrey la gente se junta. 
  
Otra vez llegaste tarde:
estás vivo por impuntual, por no asistir a la cita que
a las 13:14 te habíadado la muerte,
treinta y dos años después de la otra cita, a la que
tampoco llegaste a tiempo. 

Eres la víctima omitida. 
El edificio se cimbró y no viste pasar la vida antetus ojos,
 como sucede en las películas. 
Te dolió una parte del cuerpo que no sabías que existía:
La piel de la memoria, que no traía escenas de tu vida,
 sino del animal que oye crujir a la materia. 

También el agua recordó lo que fue 
cuando era dueña de este sitio. 
Tembló en los ríos. 
Tembló en las casas que inventamos en los ríos. 
Recogiste los libros de otro tiempo,
 el que fuiste hace mucho ante esas páginas. 

Llovió sobre mojado después de las fiestas de la patria,
Más cercanas al jolgorio que a la grandeza. 
¿Queda cupo para los héroes en septiembre? 
Tienes miedo. 
Tienes el valor de tener miedo. 
No sabes qué hacer, pero haces algo. 
No fundaste la ciudad ni la defendiste de invasores. 
  
Eres, si acaso, un pordiosero de la historia. 
El que recoge desperdicios después de la tragedia. 
El que acomoda ladrillos,
junta piedras, encuentra un peine,
dos zapatos que no hacen juego, una cartera con fotografías. 
El que ordena partes sueltas, trozos de trozos, 
restos, sólo restos. 
Lo que cabe en las manos. 

El que no tiene guantes. 
El que reparte agua. 
El que regala sus medicinas porque ya se curó de espanto. 
El que vio la luna y soñócosas raras, 
pero no supo interpretarlas. 

El que oyó maullar a su gato media hora antes y sólo lo
entendió con la primera sacudida,
 cuando el agua salía del excusado. 

El que rezó en una lengua extraña porque olvidó cómo se reza. 
El que recordó quién estaba en qué lugar. 
El que fue por sus hijosa la escuela. 

El que pensó en los que tenían hijos en la escuela. 
El que se quedó sin pila. 

El que salió a la calle a ofrecer su celular. 
El que entró a robar a un comercio abandonado
y se arrepintió en un centro de acopio. 
El que supo que salía sobrando. 
El que estuvo despierto para que los demás durmieran. 

 El que es de aquí. 
El que acaba de llegar y ya es de aquí. 
El que dice "ciudad" por decir tú y yo 
y Pedro y Marta y Francisco y Guadalupe. 
El que lleva dos días sin luz ni agua. 
El que todavía respira. 

El que levantó un puño para pedir silencio. 
Los que le hicieron caso. 
Los que levantaron el puño. 
Los que levantaron el puño para escuchar si alguien vivía. 
Los que levantaron el puño para escuchar si alguien
vivía y oyeron un murmullo. 
Los que no dejan de escuchar.  

*Juan Villorrio

2 DE OCTUBRE NO SE OLVIDA